La situación económica de Grecia sigue siendo delicada, pero se prevé un repunte del PIB en 2017 por el crecimiento de algunos sectores.
Según el último informe difundido por Crédito y Caución pone el foco en el crecimiento en Grecia, que podría llegar a alcanzar el 2,7% en 2017. Impulsado por un lado por la inversión, por el aumento del consumo privado y por otro; por el aumento de las exportaciones. Se espera un crecimiento durante este año en sectores como; el turismo, la alimentación, el transporte internacional y el envasado. En comparación con algunos países europeos se prevé que las exportaciones de productos agrícolas, el petróleo, la farmacia y el aluminio se beneficiarán de la mayor demanda externa y la mejora de la competitividad internacional del país.
Sectores como la construcción, el textil y el sector financiero siguen en una situación tensa. El sector bancario griego sigue afectado de forma negativa por una elevada proporción de préstamos dudosos, que suponen aproximadamente el 37% del saldo vivo. Lo que ha provocado que el crecimiento del crédito sea necesario para revitalizar el movimiento del sector privado y apoyar la expansión económica.
Apesar de que haya habido un descenso de los retrasos en los pagos desde 2016, no se esperan mejoras significativas en durante este 2017. Sin embargo, se espera que el nivel de insolvencia sea cinco veces más alto que en los años anteriores a la crisis, y que disminuya levemente, por primera vez desde 2008. La mejoría se concentrará en sectores como las tecnologías de la información , la alimentación, y la electrónica. Aunque los niveles en otros sectores, como construcción, textil o maquinaria, se mantendrán altos y sin cambios.